domingo, marzo 26, 2006

Una vez más

Una vez más,
todo se vuelve realidad,
esa realidad lenta y aletargada,
este dolor caliente y asfixiante,
aquí se acaba el aire,
las flores marchitas
terminan por suspirar.
Es esta muerte pudriéndose,
este caminar por la calle
donde tu aroma deja de existir.

Aquí muero, una vez más,
cansado y solo y triste y moribundo,
con solo un pedazo de papel y estas letras
las mismas letras de siempre,
que tan solo saben llorar por ti.

Allá afuera, y aquí adentro,
el tiempo ha alentado
su paso insospechable,
esa marcha de muerte,
este túnel oscuro y sin aire.
Una vez más la soledad
es ese parpadeo intermitente,
ese sueño perpetuo.
No hay salida
de este laberinto ardiente,
de esos tus ojos
en el otro asiento del vagón.

Aquí se queda, una vez más,
el silencio de tus manos sosteniéndose,
tu anónima existencia,
todo transcurre rasgando el aire,
ese sopor sobre la ciudad nocturna
que no muere,
que late desesperadamente,
como esos suicidas que se desangran,
como esos campos que arden perpetuamente
en medio de cenizas.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

:s


besos

Häny dijo...

no pude acabar de leer, las lagrimas ya estaban corriendo
visitame! ya no he sabiado de ti

Besos

Anónimo dijo...

:S

A veces...

:´(

Un besito
Edith